Al igual que nosotros nos ponemos el cinturón de seguridad al montar en el vehículo, pues nos puede salvar la vida, le hacemos a nuestro mejor amigo un flaco favor si lo llevamos suelto en el coche, e indirectamente nos lo hacemos a nosotros. Sabéis que una pequeña mascota de dos kilos en un accidente a 100 Kilómetros por hora, si impacta contra nosotros es como si nos golpearan con 60 kilos. Si tenemos la suerte que contra nosotros no golpee, pensar en el golpe que se llevará ella contra cualquier parte dura del vehículo.

En el mercado hay muchos dispositivos para llevar seguro a nuestro animal, trasportines, redes de maletero, separadores rígidos de maleteros, si gustamos de llevarlo con nosotros en los asientos, collar de anclaje en el cinturón de seguridad y algún otro dispositivo más que no recordamos, pero siempre debemos viajar con alguno de ellos.

Antes de viajar es bueno dar un largo paseo con nuestro animal, hará que se canse, haga sus necesidades y se relaje, esta actividad la realizaremos inmediatamente también cuando lleguemos, buscando el mismo resultado y sumando que se familiarice con su nuevo entorno, con los nuevos olores, sonidos, si es macho evitaremos que marque todo lo que encuentre en el exterior del hotel, hostal, casa rural, etc…

Si el tiempo es caluroso, no olvidarse de dar de beber varias veces en el trayecto, así como si acaba de comer (cosa poco recomendable, mejor con algunas horas desde la última ingesta para evitar mareos y vómitos), y en tiempo frío también dar de beber si el trayecto es largo.

Los perros gustan poco de cambiar de pienso, soliendo tener pequeñas alteraciones digestivas si se les cambia de golpe, por lo tanto, no olvidarse de la comida habitual es importante. No es la primera vez que a alguien con el ajetreo de viaje olvida la comida de su mascota, si se va a una gran ciudad no suele haber ningún problema para encontrar nuestra marca de pienso, pero si se viaja a la montaña o núcleos urbanos pequeños la cosa cambia, desde aquí hemos querido evitar este problema dejándoos enlaces de las mejores tiendas y clínicas veterinarias de España donde encontrar los mejores productos, la mayoría de ellas tienen incluso entrega a domicilio, entrega urgente e incluso con gastos de envíos gratuitos.
Se ha denunciado en las redes sociales que hay piensos en el mercado, marcas blancas de grandes cadena de supermercados, que están causando graves enfermedades en perros y gatos, yo lo puedo confirmar por una amiga que tuvo que sacrificar su perro por dar de comer esta comida que le había causado un deterioro irrecuperable en los riñones, fue el veterinario el que le informó que sospechaban que era la comida pues llevaban varios casos y siempre los animales eran alimentado con la misma marca.

Si queréis saber más sobre este tema sólo tenéis que buscar en cualquier buscador «problemas con comidas para perros».

Recomendamos que vuestra mascota la alimentéis con una buena marca de pienso, hay muchas en el mercado y siempre encontraremos una que se ajuste a nuestro bolsillo, de marcas serias y consolidadas, si respetáis siempre la dosis recomendada, una marca buena puede salir más económica que una marca barata y con poca proteína, evitando cantidades excesivas de comida y obesidad en nuestros animales.

Muchos de nuestros animales están acostumbrados a estar en casa con nosotros, pisando sobre parquet, tarima, gres, salir dos o tres veces al día. Por la calle a través de suelos de cemento o asfalto hasta llegar al parque donde encuentran césped o arena. Ésto está bien, no es que sea malo, pero sus zapatos son las almohadillas y estas se acostumbran a ello, digamos que se suavizan. Cuando llegamos al campo a nuestras mascotas, al igual que nos pasa a nosotros, se sienten más vitales, con ganas de hacer más ejercicio físico, de descubrir, de andar, pero para ello nosotros nos pertrechamos unas buenas botas o zapatillas deportivas, no se nos ocurre ir con las zapatillas de andar por casa.

No podemos cambiarles las almohadillas a nuestros perros, pero si endurecérselas, es muy recomendable y casi obligatorio en razas medias y grandes (con peso), para ello tenemos dos formas: sacar de forma gradual varias semanas antes de nuestro viaje a nuestro animal por el campo, que pise espinos, piedras, rocas, arbustos y todo lo que encontremos en la naturaleza, o hablar con nuestro veterinario y que nos recete un endurecedor de almohadillas, suelen ser unos geles o rollones de fácil aplicación que funcionan muy bien. Evitaremos cojeras temporales producidas por grietas y pequeñas heridas que pueden arruinar nuestras vacaciones, esta medida sobre todo hay que tomarlas si se viaja en tiempo seco y sobre todo a la montaña, donde el terreno suele ser más pedregoso y abrupto.

Otras medidas a tomar es revisar que el collar antiparasitario no esté caducado, o las pipetas estén en periodo de eficacia; si se viaja a alguna zona infectada por leishmaniosis (en aumento dentro de la península, por desgracia), que el collar o las pipetas sirvan para el mosquito transmisor; si tu animal es de esos que les gusta comer de todo lo que encuentra, es muy recomendable que les hagamos una desparasitación extra cuando volvamos a casa.